¿Es legal tener un gato caracal en España?

⏳ Tiempo estimado de lectura: 10 minutos

¿Es legal tener un gato caracal en España? Esta pregunta se ha vuelto cada vez más frecuente entre los amantes de los animales exóticos que buscan expandir sus horizontes más allá de las mascotas tradicionales. Los gatos caracal, conocidos por sus distintivas orejas puntiagudas y su elegante porte, cautivan a cualquiera con su belleza y misticismo. Sin embargo, antes de considerar la posibilidad de acoger a uno de estos majestuosos felinos en nuestro hogar, es importante entender la legislación española respecto a la tenencia de especies no convencionales como mascotas.

En este artículo, exploraremos en detalle las leyes y regulaciones que rigen la tenencia de gatos caracal en España, así como otros aspectos importantes a considerar, como el bienestar animal, las implicaciones éticas y las alternativas viables para aquellos interesados en la vida silvestre exótica.

¿Es el caracal un gato doméstico?

El caracal, conocido por sus distintivas orejas negras y puntiagudas con elegantes penachos, es un felino de tamaño medio que no se considera un gato doméstico tradicional. A pesar de esto, existe cierto interés en mantener a estos animales como mascotas exóticas, lo que ha generado debate sobre su idoneidad y bienestar en entornos domésticos.

Los caracales son animales solitarios con un territorio que varía enormemente en tamaño y prefieren vivir en solitario excepto durante la temporada de apareamiento. Estos felinos son depredadores ágiles, capaces de saltar alturas impresionantes para capturar aves en vuelo, lo que demuestra su adaptabilidad y habilidades de caza en su hábitat natural. Su dieta carnívora requiere una atención especial en cautiverio, necesitando alimentos que reflejen su régimen natural en la vida silvestre, lo cual puede ser un desafío en un entorno doméstico.

Aunque hay ejemplos históricos de caracales domesticados para la caza, y algunos cruces híbridos entre caracales y gatos domésticos han intentado suavizar su temperamento salvaje, estos esfuerzos no cambian la esencia salvaje del animal. Adoptar un caracal conlleva riesgos significativos, no solo para las personas sino también para el felino, ya que estos híbridos pueden enfrentar numerosas complicaciones de salud y no se adaptan fácilmente a espacios pequeños. Además, el proceso de cría de estos animales plantea serios cuestionamientos éticos, incluido el bienestar de los animales involucrados y la viabilidad de las crías.

Aunque el caracal puede cautivar con su belleza y agilidad, es fundamental reconocer y respetar sus necesidades y comportamientos naturales, lo que generalmente significa evitar mantenerlos como mascotas en un entorno doméstico. La mejor manera de apreciar a estos magníficos felinos es a través de esfuerzos de conservación y educación, que promuevan su bienestar en su hábitat natural.

es legal tener un caracal

¿Cuántos años vive un gato caracal?

El gato caracal puede alcanzar una longevidad de hasta 17 años.

¿Cuánto cuesta un gato caracal en España?

Los gatos caracales pueden tener un precio de adquisición que oscila entre 5.000 y 10.000 Euros en España. Este rango de precios varía dependiendo de factores como la edad, el género, el origen, la pureza de la raza, el estado de salud del animal, o si cuenta o no con los pertinentes documentos y permisos legales​.
Además del coste inicial, es esencial considerar los gastos continuos asociados a su cuidado. Los caracales requieren una dieta especializada basada en carne, espacio adecuado para su actividad física y visitas regulares al veterinario, lo que supone una inversión a largo plazo significativa para garantizar su bienestar.

¿Por qué la gente quiere tener un gato caracal como mascota?

El interés en tener un gato Caracal como mascota surge de su impresionante belleza, su naturaleza exótica y características físicas únicas. Este felino mediano destaca por su agilidad, inteligencia y la habilidad para realizar saltos de hasta tres metros de altura, lo que le ha valido el apodo de “gato volador”​.
Sus orejas largas y puntiagudas, adornadas con elegantes penachos, son su rasgo más distintivo, combinadas con un pelaje suave y tupido que varía de tonos naranjas a rojizos.
La fascinación por los Caracales como mascotas también se ve alimentada por su historia y simbolismo cultural. Fueron muy valorados en el antiguo Egipto, donde se les consideraba guardianes de las tumbas de los faraones. Esta herencia histórica, junto a su impresionante apariencia y capacidades físicas, contribuye a su atractivo.

¿Es buena idea tener un gato caracal como mascota?

Adoptar un gato caracal como mascota no es recomendable por diversas razones, vinculadas tanto a su naturaleza salvaje como a las implicaciones éticas de su cría y mantenimiento en entornos domésticos. A continuación, se presentan los argumentos más relevantes para desaconsejar su tenencia como animal de compañía:

  • Impacto en el Bienestar Animal: La cría de caracales para su venta como mascotas conlleva prácticas cuestionables, como el sacrificio de aquellos que no cumplen con ciertos estándares o el abandono de ejemplares adultos al desarrollar su carácter salvaje. Esta situación perpetúa el tráfico de seres vivos y el sufrimiento animal.
  • Características Físicas y Comportamentales: Los caracales son felinos de tamaño medio o grande, con un peso medio de 17 kilos, capaces de medir hasta 92 centímetros de largo. Destacan por su fuerza, velocidad y resistencia, así como por su aguda vista y oído, lo que los convierte en depredadores efectivos. Físicamente, son reconocibles por su pelaje corto y denso de tonalidades rojizas, grandes orejas con penachos, y una expresión que recuerda a la de los gatos domésticos y los grandes felinos.
  • Independencia y Solitario Comportamiento: El caracal muestra una marcada tendencia a la independencia y a un comportamiento solitario, evitando la compañía de humanos y otros animales. Aunque los cachorros pueden parecer tiernos, al crecer manifiestan una fiereza propia de su especie salvaje. Este comportamiento subraya la dificultad de establecer vínculos afectivos estrechos con ellos.
  • Dieta Específica y Cuidados Intensivos: Su dieta carnívora exige atenciones especiales, alejadas de los alimentos procesados para gatos domésticos. Requieren carne fresca diariamente, lo que implica una mayor inversión y esfuerzo por parte de los propietarios. Además, su salud puede verse comprometida por enfermedades genéticas derivadas de cruces no naturales, como los realizados con gatos abisinios.
  • Desafíos de Convivencia y Legislación: A pesar de la existencia de caracales domésticos, estos no dejan de ser salvajes y su tenencia representa un riesgo tanto para las personas como para otros animales domésticos.

El caracal es un depredador nato, adaptado para cazar gracias a su fuerza, velocidad y resistencia, con una dieta que naturalmente incluye liebres, roedores, crías de antílope y aves. Su comportamiento solitario y territorial, sumado a su capacidad de marcar territorios extensos, resalta su incompatibilidad con un entorno doméstico típico.

Existen intentos de domesticación a través de cruces con razas de gatos domésticos, buscando temperamentos más dóciles. Sin embargo, incluso estos gatos caracal domésticos retienen muchas de las complejidades de su contraparte salvaje, como una dieta carnívora estricta y necesidades de espacio y enriquecimiento ambiental significativos. Estas necesidades específicas, junto con los desafíos relacionados con su salud y bienestar, como las enfermedades genéticas resultantes de cruces no naturales, hacen que la tenencia responsable de un caracal requiera experiencia, recursos y un compromiso considerable.

Más allá de los retos prácticos, existe un debate ético sobre la cría y tenencia de caracales como mascotas. La cría con fines de domesticación puede resultar en sufrimiento animal, tanto por las condiciones en las que se mantienen como por el destino de aquellos animales que no se adaptan o no son deseados para la cría o como mascotas. Este ciclo contribuye a una demanda que fomenta la captura y venta de especies salvajes, planteando problemas de conservación y bienestar animal.

¿Tener un gato caracal en España es legal?

Tener un gato caracal como animal doméstico en España se encuentra actualmente sujeto a normativas específicas que varían de acuerdo a la Comunidad Autónoma. Exceptuando Madrid, Andalucía, Navarra y la Región de Murcia, donde se prohíbe expresamente la posesión de carnívoros que superen los 5 Kg al alcanzar su madurez, en el resto de las comunidades es legal tener un gato caracal bajo el cumplimiento de ciertos requisitos administrativos y el acatamiento a la normativa CITES.

gato caracal leyes españa

Con la reciente aprobación de la ley de protección y derechos de los animales, se ha instaurado una moratoria que impide adoptar como mascotas a mamíferos salvajes que sobrepasen los 5 kg de peso en su fase adulta, hasta que se finalice la elaboración del Listado Positivo de animales. Este listado, cuya creación debe ser concluida en un plazo máximo de 12 meses tras la implementación de la ley, determinará, a través de un comité científico y basándose en criterios de bienestar animal, seguridad ciudadana, salud pública y conservación del medio ambiente, si especies como el caracal son consideradas adecuadas para ser tenidas como mascotas.

El gato caracal no está incluido dentro del Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, una lista que incluye especies consideradas una amenaza para la biodiversidad autóctona, los hábitats o los ecosistemas en España. No menciona al gato caracal, lo que indica que esta especie no está clasificada bajo este criterio de invasividad o amenaza a nivel nacional.

En España, la legalidad de tener un gato caracal, conocido también como lince del desierto, se encuentra en un área bastante regulada y con ciertas restricciones debido a su naturaleza salvaje. Los caracales son animales exóticos que requieren de cuidados específicos y un entorno adecuado para su bienestar. La legislación española, mediante la Ley 42/2007 de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad (y la Ley 31/2003 de Conservación de la Fauna Silvestre en Parques Zoológicos en caso de zoológicos), regula la tenencia de este tipo de animales, estableciendo requisitos estrictos para garantizar tanto su bienestar como la seguridad de las personas.

Para tener un gato caracal como mascota en España, en situaciones donde se justifique tener un animal silvestre debido a fines de preservación, educacionales o investigativos, es necesario obtener una autorización administrativa, asegurando que se cumplan varios requisitos, incluyendo instalaciones adecuadas que cumplan con medidas de seguridad específicas y el bienestar del animal. Además, el propietario debe demostrar la legalidad de la adquisición del caracal, a través de certificados de origen o facturas de compra.

La ley también contempla la importancia de proporcionar a estos felinos un ambiente que satisfaga sus necesidades naturales, como espacio suficiente para moverse y una dieta adecuada basada en carne fresca y cruda. Además, se requiere la identificación y registro del animal mediante microchip y su inclusión en el Registro de Identificación Animal.

Aunque la posesión de un caracal no está expresamente prohibida, su tenencia se considera compleja debido a las necesidades específicas de estos animales y los potenciales riesgos para la seguridad pública y el bienestar animal. Las sanciones por incumplimiento de las regulaciones pueden ser severas, incluyendo sanciones administrativas y penales. La legislación vigente tiende a prohibir la tenencia de estos animales en ambientes domésticos, considerando tal práctica no solo peligrosa para las personas, sino también perjudicial para el bienestar de los animales.

La nueva legislación sobre bienestar animal en España aún no ha especificado la prohibición directa de tener gatos caracal como mascotas. La ley propone crear un “listado positivo” de animales permitidos como compañía, enfocándose en especies que no sean salvajes protegidas, invasoras, o que representen un riesgo para la biodiversidad. Aunque el caracal no se menciona específicamente hasta ahora, es importante estar atento a la publicación final de este listado.

¿Qué se necesita para tener un gato caracal?

Es esencial contar con instalaciones apropiadas que cumplan con las normativas de seguridad y bienestar animal, como dimensiones mínimas y materiales que aseguren la comodidad del caracal. Además, se requiere un permiso de tenencia emitido por las autoridades competentes, que puede implicar trámites adicionales y el cumplimiento de requisitos específicos, como evaluaciones veterinarias y demostración de conocimientos sobre el cuidado y manejo del animal.

Tener un caracal en un entorno doméstico plantea retos significativos debido a su naturaleza salvaje, necesidades de espacio y dieta especializada. Estos animales poseen fuertes instintos depredadores y requieren de un entorno que simule en lo posible su hábitat natural, lo que plantea interrogantes sobre la idoneidad y seguridad de su tenencia en hogares convencionales​.

¿Es legal tener un caracat en España?

En la actualidad, está permitido tener un gato caracat en la mayoría de las Comunidades Autónomas de España. Sin embargo, hay excepciones como la Comunidad de Madrid, Andalucía, Navarra y la Región de Murcia. En estas comunidades, se establece una prohibición específica contra la posesión de mamíferos carnívoros que en su etapa adulta lleguen a pesar 5 kg o más. Para el resto de las Comunidades Autónomas, la tenencia de estos animales no está prohibida, siempre y cuando se atienda a ciertos requisitos administrativos (similares a los del caracal) y se respete la legislación relacionada con el CITES (la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres).

Es legal tener un caracat en España

No obstante, sí que podría aplicar el siguiente artículo:

(…)
Animales potencialmente peligrosos: Todos los que, perteneciendo a la fauna silvestre y siendo utilizados como animales de compañía, aun con independencia de su agresividad, pertenecen a especies o razas que tengan mayor capacidad de causar la muerte o lesiones a las personas o a otros animales así como daños a los bienes.
(…)

Artículo 2 Ley 9/2022, de 30 de junio, de protección de los animales domésticos. Según esta definición, el caracat podría ser considerado un animal potencialmente peligroso.

Los caracats son el resultado de cruces específicos llevados a cabo para satisfacer la demanda de mascotas exóticas. Este proceso, iniciado accidentalmente en 1998 en el zoológico de Moscú, ha llevado a que estos animales sean especialmente solicitados en Estados Unidos y Rusia. Los caracats combinan características físicas de ambos progenitores, como un tamaño y peso superiores al gato abisinio pero inferiores al caracal salvaje, con un pelaje que puede variar en color y textura. Estos híbridos pueden tener comportamientos más inquietos y salvajes, especialmente en las primeras generaciones, lo que plantea desafíos para su domesticación y convivencia con humanos​​​​.

En cuanto a su carácter, los caracats de primera generación (directamente cruzados entre un caracal y un abisinio) tienden a ser más inquietos, energéticos, y poseen un fuerte instinto de caza, lo que puede hacerlos desafiantes como mascotas domésticas. Sin embargo, generaciones sucesivas (caracat con caracat) suelen ser más dóciles y cariñosos. Aunque algunos pueden adaptarse bien al entorno familiar, su naturaleza independiente y solitaria, junto con sus ocasionales manifestaciones de instintos salvajes, los hace únicos.

Desde el punto de vista ético, la cría de caracats no está exenta de controversia. La gestación y el parto pueden ser particularmente problemáticos, dado el tamaño desproporcionado de las crías en comparación con la madre abisinia, lo que a menudo resulta en complicaciones o incluso la muerte. Además, los problemas de salud, como la enfermedad inflamatoria intestinal, y las dificultades para adaptarse a un entorno doméstico pueden comprometer el bienestar de estos animales. La cría de caracats también plantea un debate ético más amplio sobre la creación de mascotas híbridas para satisfacer deseos humanos, a menudo a costa del sufrimiento animal.

Por favor. Si te ha ayudado, ¡compártelo! 💞

Resuelve tus dudas legales gratis 💬

Con la potencia de la Inteligencia Artificial, prueba nuestro servicio disponible para ayudarte completamente gratis a resolver tus dudas y consultas, tal y como si tuvieses Un Abogado Online
Ó chatea con nuestro equipo entrenado con nuestros contenidos:
¿Necesitas ayuda legal profesional con ¿Es legal tener un gato caracal en España?? 🎓
Habla con abogados Online reales y verificados. Encuentra tu solución en minutos con atención personalizada 24 horas para resolver todas tus dudas. Consultas ilimitadas, prueba 3 días por 5€. Después son 49€ al mes. Puedes cancelar cuando quieras (sí, también dentro de los 3 primeros días)
Hablar con un abogado al mejor precio
logouaomini
En Un Abogado Online, creemos que todo el mundo tiene derecho a conocer las leyes que rigen nuestro día a día.

Por eso, tratamos de ofrecerte los mejores recursos gratuitos, para que conozcas tu situación dentro del ámbito legal, sepas qué puedes o no hacer, y en base a ello poder tomar una decisión más informada, conociendo tus necesidades. 
magnifiercross linkedin facebook pinterest youtube rss twitter instagram facebook-blank rss-blank linkedin-blank pinterest youtube twitter instagram